Ex/James Boysen, desarrollador informático de 55 años, estuvo casi una década sin parte de su cráneo por el tratamiento de un cáncer muy raro. Ahora es la primera persona del mundo en recibir un trasplante de cráneo y cuero cabelludo, en una intervención en la que también recibió riñón y páncreas.
En el 2006 le diagnosticaron leiomiosarcoma, un cáncer que afecta a los músculos. Recibió un tratamiento para la masa muscular que recubre el cráneo con una combinación de quimioterapia y radioterapia, pero dañó el tejido de piel que lo rodeaba. El cráneo y el cuero cabelludo quedaron destrozados por el tratamiento, y el cerebro quedó en una situación vulnerable, ya que el agujero, que estaba en la parte superior de la cabeza, medía 25 por 25 centímetros.
Como le daban medicación antirechazo para recibir riñón y páncreas, los médicos pensaron en una operación triple y esperaron 4 años hasta que apareció un donante adecuado, quien proporcionó todos los órganos y cuya identidad no se supo. “Tengo mucho más pelo que cuando tenía 21 años”, broméo Boysen en conferencia de prensa.
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